“No quiero ver injusticias ni miserias;
no quiero ver militares ni princesas;
no quiero ver dictaduras ni pobrezas;
no quiero ver religiones ricas, ni reinas.
Que sólo quiero yo ver a los pobres sin miseria;
a los ricos sin dinero desnudos en esta tierra;
a infinitos corazones unidos por el amor
y unidos contra la guerra. “
no quiero ver militares ni princesas;
no quiero ver dictaduras ni pobrezas;
no quiero ver religiones ricas, ni reinas.
Que sólo quiero yo ver a los pobres sin miseria;
a los ricos sin dinero desnudos en esta tierra;
a infinitos corazones unidos por el amor
y unidos contra la guerra. “
Manolo Chinato
Mucha gente me dice que meterse en complicaciones no merece
la pena, lo que algunos llaman “política y esas cosas” no te conducen a nada,
¿Por qué pensar tanto?, ¿Por qué preocuparse por los demás?.La respuesta es
bien sencilla, prefiero ser un indio, me gusta ser Gerónimo con pinturas de
guerra y terminar siendo nieto de Zapata, las plumas al viento y con cara de pelea.
Simplemente la resistencia es parte de mi ser, es la llama que me ilumina en
los momentos difíciles.
Cuando era niño los médicos no apostaban por que yo
alcanzara siquiera la adolescencia, en los primeros momentos gracias a esa
inocencia infantil apenas era consciente de la situación. Según pasaban los
años pude ver que no era como los demás, ese niño que no podía correr, jugar al
fútbol o subir las escaleras del colegio. En esas circunstancias solo te quedan
dos opciones, resignarte esperando tu negro destino o luchar contra la marea,
una guerra interna entre resignación y o resistencia.
Pero el segundo motivo de mi alma de guerrero comanche es
que no soportaba las injusticias, no podía dejarlo pasar, tenía que intervenir,
protestar, patalear. Quizás por necesidad, quizás por obligación, centre mis
esfuerzos en fortalecer mi intelecto y en los libros encontré muchas
respuestas, injusticias y héroes locos que lucharon contra molinos. Busque
ayuda y encontré la amistad, unos ángeles de la guarda, mis amigos de siempre.
Todavía me nutro de la misma fuente, pero ahora me siento un
tipo con suerte, he nacido en occidente, no he conocido el hambre ni la guerra
y sobre todo, tengo una familia que me quiere. Me siento afortunado y me haría
feliz saber que cualquier persona del planeta tierra pudiera disfrutar de las
pequeñas cosas, empezar por tener el plato lleno, una educación digna y un
medico que te atienda, terminando en algún lejano futuro, en un mundo de
igualdad donde todos seamos felicidades y sepamos que no existen los diferentes,
solo una diversidad que nos enriqueze.
Por ello si me pidieran elegir bando entre pobres y ricos,
entre justicia e injusticia, entre héroes y villanos, mi respuesta es PREFIERO SER UN INDIO.
Yo tambien compañero muchas gracias por todo lo que me has enseñado sobre la actitud sobre no rendirse y llevar los embates de esta vida con dignidad sigues ya lo sabes eres mi heroe de Troya
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